Nuestro director global de Reputación, Sostenibilidad y RSE, Manuel Sevillano, ha participado en un reportaje de Dircomfidencial donde, junto a otros directivos, debaten sobre la macrorredada que sufrieron las Big Four el pasado mes de noviembre y las consecuencias que supone a nivel reputacional.
«Manuel Sevillano recuerda que según el ranking Merco la reputación de las Big Four “está bastante estabilizada en los últimos 5 años y se sitúa en el entorno del puesto 65-75”, lo que significa, en su opinión, que de entrada “no es mala, aunque desde luego, un poco lejos de los sectores con mejor reputación”.
Además, admite que “es pronto para poder afirmar si la inspección de trabajo les ha afectado o no reputacionalmente”, aunque avanza que la reputación “afecta a todos los grupos de interés y no solo a los trabajadores” y su gestión “no debe estar sometida a los vaivenes de la actualidad, que no quiere decir que no tengan que hacer nada”.
«Deben comunicar más»
El senior lecturer del IESE Business School, Yago de la Cierva, también opina como punto de partida que “las Big Four tienen una buena reputación en el sector empresarial, aunque menos fuerte que hace años”. Advierte que “cuando se está bajo la lupa del regulador, hay que ser completamente ejemplares en el cumplimiento de la legislación vigente”.
El académico sospecha que la macroinspección afecta “poco reputacionalmente”, aunque recomienda a estas consultoras de servicios profesionales “hablar más en público, ofrecer intervenciones ante los medios y más transparencia informativa. No pueden callarse, tienen que hablar”.
Un plan de employer branding para el futuro talento
El director global de Reputación, Sostenibilidad y RSE de ATREVIA considera en este sentido que “la principal fortaleza de las Big Four es la marca empleadora actual y la debilidad la marca empleadora futura, dicho esto con todas las precauciones porque tendría que analizar la analítica de cada una de sus compañías”.
Recomienda «poner en marcha un programa estructural y estratégico para mejorar el reconocimiento del futuro talento y, además, lo vincularía con la sostenibilidad». «La reputación de las Big Four en la variable de atracción y retención de talento tiene más reconocimiento entre los trabajadores actualmente en activo que entre el futuro talento, entendiendo como tal a los universitarios próximos a incorporarse al mercado laboral”, concluye.
En opinión de los expertos, aunque las consultoras puedan salir hoy indemnes desde el punto de vista reputacional no está garantizado que ese efecto persista con la entrada de una nueva generación de empleados, un relevante grupo de interés con altas capacidades para erosionar la reputación de las empresas».
Puedes leer aquí el reportaje completo publicado originalmente en Dircomfidencial.