Por motivos profesionales, la pasada semana tuve que viajar a Barcelona, sede central de Inforpress y lo hice con la compañía aérea Vueling. Aunque en anteriores ocasiones ya lo había hecho, en esta ocasión presté especial atención, percibiendo y auditando lo que a mí alrededor ocurría, con los ojos de alguien, que como yo, trabaja en un grupo de comunicación.
Desde un primer momento, los mensajes –verbales y no verbales- que emitían eran diferentes al de cualquier otra compañía aérea y es que en Vueling no dejan de lado ninguna de las variables que componen el tradicional marketing mix (Product, Place, Promotion & Price).
Aunque en otras ocasiones he viajado en otras compañías aéreas low cost en las que la comunicación es también diferente a las tradicionales, creo que aprovechan la ocasión para no solo descuidar ciertos detalles, sino para cobrarte hasta casi por ir al baño. Respeto el modelo –de hecho es un éxito en ventas- pero como consumidor, mi percepción del servicio es que es peor de lo que realmente es, caso que no ocurre con Vueling.
Cuando tomas asiento en cualquier avión de Vueling, compruebas que es el mismo que utiliza Iberia, nada es diferente, salvo el color amarillo que predomina, esto, para los que utilizamos este medio de transporte con cierta frecuencia, transmite simpatía y porque no, seguridad.
¿Qué diferencia existe entonces entre una compañía de otra? ¿Cómo se justifica esa diferencia de coste entre una y otra?
La diferencia de precios la justifican los servicios que una y otra prestan, pero hay mas, la mayor diferencia es la adaptación de su comunicación al target, que va desde la forma en que se dirigen a ti, mucho más friendly , una carta de menús más que paquetizada y ad hoc para el tipo de cliente o bien una revista o publicación menos corporativa y más entretenida… y todo esto entre otras muchas más experiencias que puedes vivir, desde el mismo momento en que empieza el proceso de compra de tu billete de vuelo…
Sin lugar a dudas, esto es también un riego, pues seguro que lo que yo percibo como atractivo o simpático, para muchos otros no lo sea, pero es el precio del posicionamiento de una marca.
Por ello, si existe un grupo de consumidores -de similares características- que no se ve identificado con ellos, querrá decir que lo están haciendo bien y que por lo menos están cumpliendo un claro objetivo, conseguir que su público objetivo se identifique con la marca y que volar, sea para estos, toda una experiencia.
Imagen: Vueling Facebook