Las compañías se ven inmersas, de forma constante, en complejos procesos de toma de decisión estratégica que les permiten adaptarse a las demandas de sus clientes. En este proceso de toma de decisión destaca una herramienta fundamental que todo directivo debería manejar antes de tomar una determinada decisión. Un error en este proceso puede llevar a la compañía a perder su posicionamiento en el mercado o a desaprovechar oportunidades ventajosas.
Para tomar decisiones estratégicas, los directivos de la compañía deben de contar con una información o un conjunto de datos que les permita obtener una imagen nítida del escenario en el que se están desenvolviendo. Los datos son fundamentales, dado su alto valor estratégico, pero determinar cuáles son los que se necesitan de forman concreta es lo que permitirá a los directivos tomar decisiones mucho más acertadas acorde al proceso estratégico en el que se encuentran.
El siguiente artículo pretende analizar la primera fase del denominado “Ciclo de la Inteligencia”. Tras el documento, “La inteligencia competitiva al servicio del sector privado”, en el que se analizaba el proceso metodológico de forma genérica, en este nuevo artículo analizamos de forma más específica la primera fase de este proceso metodológico.
Las fases del Ciclo de Inteligencia 1ª Fase Identificación de Necesidades