Nuestros compañeros Miguel Pérez y Gerardo Veiga presentaron en Barcelona el estudio El sector infantil en España, una investigación impulsada por KID’S Cluster y elaborada por ATREVIA, que se ha convertido ya en un recurso de referencia para comprender cómo viven, aprenden y se relacionan hoy niños y adolescentes. El informe ofrece una radiografía actualizada de un ecosistema infantil en plena transformación, donde educación, ocio, cultura y tecnología avanzan a un ritmo difícil de seguir para empresas, instituciones y familias.
Un amplio retrato del sector infantil actual
El estudio combina escucha social avanzada, análisis de tendencias en Internet, entrevistas con expertos, talleres con empresas del sector y una encuesta nacional a más de 1.100 familias. La amplitud metodológica permite dibujar un panorama en el que la frontera entre lo presencial y lo digital es cada vez más difusa: el 67% de los jóvenes de 15 a 17 años asegura que su vida social sucede sobre todo en Internet. Sin embargo, el deseo de las familias apunta en otra dirección, reclamando más tiempo compartido y actividades que aporten valor educativo o creativo.
Esa búsqueda de experiencias con propósito también se refleja en el ámbito cultural: el hogar se consolida como centro de actividad, con más de 31 millones de visitas anuales a centros culturales y un 70% de participación en programas educativos.
La investigación confirma, además, la evolución hacia modelos de ocio más experienciales. Un 83% de niños y adolescentes participa en actividades extraescolares y un 62% forma parte de asociaciones o clubes, datos que subrayan la importancia de propuestas que combinen aprendizaje, juego y participación.
Digitalización, bienestar y los retos a los que se enfrentan
La conexión digital es prácticamente universal (95% de los adolescentes ya están en Internet), pero el estudio alerta de que un 35% muestra dificultades en competencias digitales. A ello se suman los indicadores de salud mental: un 30% de adolescentes declara ansiedad o tristeza frecuente y un 21% se siente solo a pesar de la conexión constante. El informe señala que afrontar estas tensiones será clave para cualquier actor del sector.
En este escenario, se perfilan cuatro líneas que marcarán el futuro: el avance de experiencias híbridas que combinen presencialidad y tecnología; el peso creciente de la educación emocional y el pensamiento crítico; la necesidad de propuestas creativas, manuales y con sentido; y la importancia de garantizar la equidad en el acceso a actividades formativas y de ocio.
El reto pasa por equilibrar innovación y humanidad, adaptando la oferta educativa, cultural y de ocio a un contexto que exige tanto acompañamiento emocional como creatividad y accesibilidad.
La presentación en Barcelona permitió compartir estas conclusiones con organizaciones del sector y abrir un espacio de diálogo sobre cómo acompañar mejor a niños, adolescentes y familias en un contexto que exige, a partes iguales, innovación, humanidad y accesibilidad.


