Artículo escrito por Clara Sánchez.
¿Cuántas relaciones y con quién mantiene tu organización a diario? ¿Sabes con quién conviene colaborar más estrechamente, a quién simplemente mantener informado?
En un entorno empresarial donde todo cambia rápido —estructuras complejas, expansión global, crecimiento acelerado— no basta con querer impactar en nuestro stakeholder, debemos tener un sistema que lo mida tener buenas intenciones. Necesitamos método, estrategia y visión relacional.
Porque ninguna organización vive en una burbuja. Todas forman parte de un ecosistema donde proveedores, clientes, instituciones, aliados y comunidades influyen (y mucho) en su capacidad de crear valor. Saber gestionar estos vínculos ya no es una habilidad blanda: es una ventaja competitiva.
Conscientes de esta realidad, en ATREVIA hemos desarrollado una metodología para organizar, clasificar y medir las relaciones con stakeholders. Una herramienta pensada para transformar la complejidad en claridad, las conexiones en colaboración, y la colaboración en valor compartido.
Ninguna empresa opera en aislamiento, toda organización forma parte de un ecosistema relacional complejo, en el que interactúa con múltiples actores: desde proveedores, clientes y socios estratégicos, hasta instituciones públicas y organismos reguladores. Estas relaciones no solo son inevitables, sino que resultan esenciales para el desarrollo y sostenibilidad del negocio.
En contextos corporativos de alta complejidad —ya sea por su crecimiento acelerado, presencia en múltiples geografías o estructuras descentralizadas—, la gestión eficaz de los grupos de interés se convierte en un reto estratégico. Ante esta realidad, Atrevia ha desarrollado una metodología integral que permite organizar y medir de forma sistemática las relaciones con stakeholders, con el fin de optimizar los planes relacionales y generar valor compartido.
De la visibilidad a la acción: objetivos de una gestión estructurada
El modelo parte de tres objetivos fundamentales:
- Hacer visibles a todos los stakeholders que interactúan con la organización.
- Centralizar y dotar de coherencia global a la gestión relacional.
- Optimizar las estrategias de relación y fomentar nuevas oportunidades de colaboración.
Más allá de identificar con quién se relaciona la empresa, este enfoque busca construir una base de conocimiento compartido que permita alinear acciones, inspirar nuevas dinámicas de colaboración y consolidar un modelo homogéneo que evolucione con el negocio.
Una metodología estructurada en cinco fases
El plan se articula en cinco etapas que conforman un modelo escalable y adaptable a diferentes tipos de organización:
- Identificación de stakeholders: elaboración de un mapa completo que contemple tanto actores internos como externos.
- Definición del modelo de relación: establecimiento de un marco común que guíe la interacción con cada grupo de interés.
- Clasificación según dimensiones clave: análisis de factores como relevancia, influencia, impacto, alineamiento estratégico o cercanía con el negocio.
- Evaluación mediante herramienta ad hoc: diseño de un sistema de medición personalizado que permite priorizar relaciones y tomar decisiones informadas.
- Propuesta de estrategia y acciones recomendadas: implementación de estrategias diferenciadas según el nivel de relación, que van desde el reconocimiento hasta la colaboración y el empoderamiento.
Una herramienta al servicio del liderazgo relacional
Esta metodología permite a las organizaciones no solo estructurar y alinear sus relaciones con los distintos stakeholders, sino también convertirlas en una fuente de ventaja competitiva sostenible. Al tratarse de un modelo vivo y dinámico, acompaña la evolución del negocio y responde a los desafíos de un entorno cada vez más interconectado, exigente y orientado a la creación de valor compartido.
La gestión estratégica de los grupos de interés ya no es una opción, sino una necesidad. Contar con una metodología sólida permite a las organizaciones liderar desde la relación, reforzar su legitimidad y construir vínculos que perduren en el tiempo.