Núria Vilanova, presidenta de ATREVIA, participó el pasado jueves en la mesa redonda «Madrid como motor de emprendimiento«, celebrada en la Universidad Pontificia Comillas, junto con Alberto Benbunan, CEO de Gelt, y David Hatchwell, presidente de Excem Group, donde intercambiaron ideas y experiencias sobre las oportunidades que ofrece Madrid para el emprendimiento.
Durante su intervención, Núria Vilanova habló sobre su experiencia cuando se instaló en la capital, en la que lleva ya 30 años: «Lo he percibido como algo muy natural, muy fácil. Soy una persona con espíritu errante y me gusta viajar, conocer culturas y personas diferentes, pero, sobre todo, aprender cosas nuevas. Y esta ciudad tiene la gran ventaja de permitirte todo esto. Madrid es una ciudad viva; pasan muchas cosas en esta ciudad de forma constante. Madrid es, sin duda, un punto de encuentro para todos, y esto te permite aprender sin necesidad siquiera de moverte«.
En cuanto al potencial que ha ido consolidando esta ciudad como atractivo de negocios e inversiones a nivel no solo nacional, sino global, nuestra presidenta aseguró que «Madrid está radiando al resto de países, pero tenemos que decirlo. Una de las cosas que estamos haciendo desde aquí es formar a muchos nuevos dirigentes, orientándoles en su labor para que contribuyan al crecimiento de sus países. Creo que eso tiene un efecto motor». América, afirmaba, constituye sin duda uno de los grandes retos, y una de las cosas que ya son una realidad es que la base de su sociedad ha mejorado, no está tan mal como hace 30 años, aunque existan todavía problemas de urgente solución como la desigualdad».
»Madrid no solo es un motor de emprendimiento para los españoles, sino que al otro lado del Atlántico también se están dando cuenta de la importante oportunidad que existe en España, y en concreto, en nuestra capital».
«Hace unas semanas, durante mi última visita a México, pude charlar con empresarios mexicanos que me confirmaron que un tercio de ellos ya invierten en España, mientras que los otros dos estarían planteándose seriamente esta posibilidad. Todo esto está generando, indiscutiblemente, un tono muy positivo, pues una de las cosas más maravillosas que tiene España es que somos tremendamente abiertos, y esto repercute también en la inversión que llega desde cualquier punto del mundo», concluyó Vilanova.
Una mesa redonda que permitió destacar el potencial de la capital española como capital de inversiones y motor de emprendimiento, desde una mirada presente y, sobre todo, futura.