El Rey de España, Felipe VI, ha entregado el III Premio Enrique V. Iglesias al Desarrollo Empresarial Iberoamericano al empresario peruano José Graña, presidente del Grupo Graña y Montero, compañía de ingeniería e infraestructura de referencia en Perú.
La entrega ha tenido lugar en el marco del XI Encuentro Empresarial previo a la XXV Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en un acto en el que también han participado el ministro de Economía español, Luis de Guindos; el galardonado en la edición de 2014, Valentín Díez Morodo; el presidente de Honor del CEAL Ibérico y presidente del jurado del premio, Enrique V. Iglesias y Núria Vilanova, presidenta y fundadora de ATREVIA y también del CEAL Ibérico.
Este prestigioso galardón se organiza con el apoyo del Capítulo Ibérico del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL Ibérico), y la colaboración de personalidades del mundo institucional, económico y empresarial iberoamericano. En el acto, Enrique V. Iglesias y Núria Vilanova han puesto de relieve el espíritu emprendedor e innovador de José Graña, así como su compromiso social basado en el desarrollo profesional de los trabajadores de sus empresas y en la sostenibilidad del medio ambiente.
José Graña ha liderado las estrategias de crecimiento más importantes de la compañía que preside como la diversificación de sus actividades y su ingreso a los negocios de flujos estables dentro y fuera del Perú. Además, Graña instauró un estilo de trabajo basado en valores de calidad, cumplimiento, seriedad y eficiencia y en una estrategia de sostenibilidad, la cual busca gestionar responsablemente sus negocios y compartir bienestar con la sociedad.
El premio Enrique V. Iglesias se creó en el año 2014 por impulso de Núria Vilanova y con el soporte del CEAL Ibérico.
El CEAL Ibérico es una organización sin ánimo de lucro constituida por empresarios, con más de 80 socios, presidentes y en muchos casos también propietarios de las mayores empresas iberoamericanas. Su objetivo principal es apoyar proyectos empresariales iberoamericanos y el desarrollo a través del crecimiento y compromiso empresarial, mediante el intercambio de experiencias y la integración entre el empresariado.