Si pudiésemos representar nuestro trabajo en un diagrama de Venn, la comunicación sanitaria, la comunicación en salud, se encuentra en la intersección de los conjuntos investigación científica, política, economía, industria farmacéutica, gestión sanitaria, sociedades médicas, profesionales del sector sanitario (medicina, enfermería, y sus respectivas especialidades) pacientes y población general. Es decir, que la comunicación sanitaria, cuenta con más caras o facetas que otros ámbitos de la comunicación con un target definido. Clientes, autoridades sanitarias y regulatorias, profesionales, industria, sociedades científicas, asociaciones profesionales, pacientes y población general. Cada uno con sus intereses y sus puntos de vista. Los llamamos stakeholders.
Representado en tres dimensiones, la comunicación en el sector de la salud cobra el aspecto de un icosaedro, un poliedro de 20 caras. Y dependiendo del proyecto en el que estemos trabajando, habremos de contar con todos y cada uno de estos aspectos a la hora de comunicar el hecho noticioso que supone el lanzamiento de un producto, los resultados de un ensayo clínico, una nueva indicación, la apertura de una clínica o la constitución de un grupo de trabajo de una sociedad profesional.
Además, en la mayor parte de las ocasiones, para desarrollar esta labor deberemos contar con diferentes equipos, no ya internos, sino del propio desarrollo de la acción, del servicio o del producto: investigadores, clínicos, posicionamiento de las compañías, otros productos de la competencia, situación de las aprobaciones, contexto económico del país, necesidades no cubiertas de los pacientes, etc.
Igualmente, a la hora de enfocar cualquier comunicación, es importante que entendamos, casi mejor que los periodistas, el aspecto fundamental que queremos trasladar y ser capaces de traducir a lenguaje cotidiano los avances médicos, científicos y técnicos y sus peculiaridades. Es decir, que en comunicación sanitaria debemos ser capaces de gestionar todos los aspectos del poliedro de la comunicación ofreciendo en cada caso nuestra mejor ‘cara’. Con los médicos utilizaremos lenguaje técnico, con sociedades médicas y otras instituciones uno más corporativo y con los periodistas hablaremos directamente en jerga del sector.
Del mismo modo, cuando llevamos a cabo una acción orientada a otros públicos, eventos, cuestiones de posicionamiento, de asuntos públicos, acciones de alto impacto o de street marketing, debemos estar pensando, a la vez, en todos los demás stakeholders y encontrar la forma de ‘alinear’ todas las caras para que cada acto, evento o comunicación no solo ‘encaje’ sino vertebre, de manera unida e integral, los intereses de todas las partes involucradas.
Por todo ello, conscientes de la complejidad de este reto, desde ATREVIA estructuramos de manera coordinada todos los intereses del área con un nuevo modelo de organización en el que encuentran su centro todos los vértices del icosaedro. Dejamos por tanto de hablar de departamentos de Salud para empezar a hablar del Área de Salud. Afrontamos una nueva etapa en la que integraremos lo mejor de cada uno de los servicios de comunicación, marketing y Asuntos Públicos y de la experiencia acumulada durante años para continuar creciendo y ampliando el icosaedro, porque la comunicación del sector afronta ahora desafíos retadores.