Hay dos cosas que me gustan especialmente y que las tengo presentes en el día a día: la comunicación, en todas sus vertientes, y la música. Uno de mis sueños de toda la vida ha sido unir mis pasiones a nivel personal y laboral. Hacer comunicación de alguna marca relacionada con la música y de algún grupo, sería un sueño hecho realidad.
Pero además de mis deseos personales, últimamente estoy viendo una importancia renovada en las bandas sonoras publicitarias y los anuncios en televisión, así como un giro hacia temas de décadas anteriores. Puede parecer un detalle, pero es algo que me llama la atención bastante porque creo que la música en la comunicación audiovisual es vital.
Sólo tenéis que prestar atención y fijaros en anuncios como el último de Seat Ibiza y la canción Give a Little bit de Roger Hodgson, o el de Yoigo para la campaña Tarifa Sin Fin y la canción Cry Baby de Janis Joplin. Tanto con versiones originales como con covers de todo tipo, e incluso de gran calidad.
Una de las que más me ha gustado últimamente es el anuncio de Chanel Nº5 y la canción You´re the one that I want de la película Grease. Una versión de gran calidad y con un enfoque absolutamente distinto de la melodía y el estilo. Eso sí, dándole un gran cuerpo al anuncio y dándole el espíritu que la marca buscaba para el producto.
Pero, ¿es que alguno no habéis visto el anuncio del nuevo Volkswagen Polo y la canción Eye of the Tiger de Survivor?
Últimamente se está poniendo de moda utilizar canciones muy conocidas para anuncios actuales, aunque no es algo nuevo en publicidad. En 1982, la Vuelta Ciclista a España utilizó un tema del grupo Azul y Negro titulado Me estoy volviendo loco, que se convirtió en un éxito del momento y sirvió para darle visibilidad en TV al evento deportivo.
Y si alguien aún no ve la unión de música y publicidad, o comunicación en otros aspectos, un ejemplo bien claro es el anuncio que rodó al principio de los años 80 el director Ridley Scott para Chanel Nº5. La música de ese spot la hizo nada menos que Vangelis. Os dejo la versión francesa y la versión inglesa, en la que se cuenta que la frase final la dice el mítico Leonard Nimoy, o más conocido como Mr. Spoke de Star Trek.
El vínculo entre música y comunicación es indudable. Si queremos darle fuerza a un spot, nada mejor que una canción conocida que otorgue esos aspectos que queremos reflejar. La música va a hacer que el telespectador sienta en su subconsciente un montón de cualidades que solo con la vista y el oído es incapaz de descubrir. La música le va a llevar a sitios insospechados, le hará volar su imaginación y le hará recordar nuestro mensaje cada vez que oiga esa sintonía. Ese poder es especial en comunicación. Es conseguir el objetivo, colocar nuestro “producto” en la mente de los diferentes públicos a los que queremos llegar.
Aunque sin duda, el rey moderno de la música para anuncios es Moby. Con sus discos Play y 18 consiguió colocar multitud de sus temas como banda sonora de anuncios en todo el mundo. Entre ellas tenemos Porcelain en un anuncio de La Primera, Bodyrock para el anuncio del Fifa 2001, o In My Heart para el spot de Nokia NSeries. Os aseguro que si escucháis esos dos álbumes, conoceréis la mayoría de las canciones y os recordarán grandes spots y películas de hace unos años. Mítica la banda sonora de la película La Playa.
Obviamente, la música es parte fundamental en la comunicación. Probad a ver un anuncio con y sin música. Nada que ver, ¿verdad?
Foto CC: El coleccionista de instantes (Flickr)