Durante el Foro ATREVIA Personas, que en esta ocasión ha se ha llamado “Bridge Building. Conecta perspectivas para conectar equipos”, organizado por ATREVIA, consultora de comunicación, se ha analizado, de la mano de Jordi Robert-Ribes, la ventaja que supone mejorar la confianza y las relaciones personales para favorecer el compromiso de los empleados y, en consecuencia, la vinculación de los mismos con los objetivos corporativos. Así, ha afirmado Jordi Robert-Ribes, ponente de la sesión, “un minuto mirándose a la cara equivale al envío de diez mil emails”.
Estimular la participación y colaboración entre los equipos de una empresa, además, fomenta el intercambio de conocimiento y el desarrollo profesional de los empleados, no solo a nivel individual sino empresarial. De esta manera, la falta de comunicación entre departamentos de una misma empresa impacta directamente en la cuenta de resultados: reduce los beneficios e incrementa los costes.
“Hay que conectar continuamente en la empresa, todos los días de la semana”, ha señalado Jordi Robert-Ribes durante el Foro ATREVIA Personas y ha añadido que “la conexión de perspectivas tiene tres etapas: primero la exploración, es decir, ¿con quién conectamos?; la segunda, la construcción de la confianza; y la tercera, el mantenimiento”.
Cada empresa está llamada a adaptar el team building a su contexto real, desde una óptica de inclusión, fomentado el engagement de todos los perfiles que trabajan en la compañía. Los directivos deben aprender a construir relaciones basadas en el contacto y el “cara a cara”: relacionarse directamente genera confianza y permite a los empleados compartir todo aquello que son capaces de aportar, creando redes de contactos a través del networking interno.
Las diferentes organizaciones tienen la responsabilidad de provocar y fomentar el contacto entre los trabajadores de diversas áreas, independientemente de su ubicación geográfica y de sus dinámicas de trabajo para generar un ambiente colaborativo de intercambio de ideas y generación de contenido.
Las empresas están llamadas a provocar el encuentro, a conocer a sus empleados y utilizar ese conocimiento junto a las grandes dosis de creatividad para conseguir que los empleados “se encuentren” de un modo natural.