La Cumbre de la OTAN celebrada esta semana en Madrid ha promovido un nuevo punto de partida en la agenda de seguridad y defensa de la Alianza con la firma por parte de sus Estados miembro de un nuevo Concepto Estratégico para los próximos 10 años, más ambicioso y explícito en la descripción de las amenazas que los precedentes.
La Cumbre, marcada especialmente por la amenaza rusa y la guerra en Ucrania, cuenta como gran hito con la próxima adhesión de Finlandia y Suecia a la Alianza, tras conseguir Turquía la aprobación de un memorando tripartito con compromisos específicos que lleva años persiguiendo, pero hay otros aspectos que trataremos de desgranar:
El concepto, como estaba previsto, clasifica a Rusia como la principal amenaza para los aliados, pero no rehúye la mirada a Oriente cuando indica, por primera vez de forma tan explícita en un documento de la Alianza, que China supone una amenaza por sus “maliciosas operaciones cibernéticas e híbridas” y su “retórica de confrontación y desinformación”.
España, por su parte, perseguía introducir en el texto y más allá de los debates sobre la cuestión ya fijados en la agenda, la mención a las amenazas provenientes del flanco sur en el documento final y sus retos asociados, tales como: la inseguridad alimentaria, el uso político de los migrantes o del abastecimiento energético. Así ha sido finalmente, con referencias además a la defensa de la integridad territorial de los aliados, si bien conviene no olvidar que seguimos partiendo de un documento político y la defensa por parte de la Alianza de ciertos territorios, como Ceuta y Melilla, no está contemplada en la actual redacción del artículo 6 del Tratado.
El cambio climático también es destacado como el desafío principal de esta generación. Así, se subraya la necesidad de una transformación del enfoque de la OTAN hacia la seguridad y la defensa en materia medioambiental. Su secretario general, Jens Stoltenberg, anunció el acuerdo de reducir las emisiones de gases en al menos un 45% para 2030, hasta llegar a cero emisiones en 2050.
En paralelo, conviene detenerse en otros anuncios situados fuera del foco mediático pero muy relevantes para la promoción de la cultura de defensa y el impulso de la industria. Durante estos días se ha presentado el denominado Fondo de Innovación, el primer fondo de capital de riesgo multisoberano del mundo, complementando al ya existente Acelerador de Innovación de la Defensa del Atlántico Norte (DIANA). Este fondo tiene el objetivo de impulsar la innovación de start-ups en el sector de defensa en fase inicial, así como la inversión de otros fondos para el desarrollo de tecnologías de doble uso prioritarias para la Alianza y destacadas en este concepto estratégico.
La Cumbre, que comenzó con el levantamiento del veto por parte de Turquía a Finlandia y Suecia finalizó este jueves con una alianza más fuerte, unida y comprometida con la defensa colectiva. Durante las próximas semanas se espera que las iniciativas presentadas, así como las declaraciones de los dirigentes políticos presentes en esta Cumbre se materialicen en hojas de ruta concretas y con un objetivo común tal y como ha indicado el secretario general: “preservar la paz y proteger nuestros valores”.