La transición digital representa una de las más ambiciosas prioridades de la Unión Europea desde el inicio de la legislatura en la que nos encontramos – periodo 2019-2024 –. Las consecuencias económicas y sociales tanto de la pandemia de la COVID-19 como de la invasión rusa de Ucrania no han hecho sino convertir esa prioridad en uno de los grandes pilares sobre los que basar la recuperación en la Unión, suponiendo, al mismo tiempo, uno de sus más grandes retos. En este contexto, el pasado mes de septiembre la Comisión Europea adoptó una propuesta sobre responsabilidad civil en Inteligencia Artificial con el objetivo de adaptar las normas de responsabilidad a la era digital y a la economía circular.
Para comprender esta nueva iniciativa, ligada al nuevo Reglamento sobre la IA, es necesario entender el enfoque por el que se rige la Unión en esta materia, centrado en la excelencia y la confianza y con el objetivo de impulsar la investigación y la capacidad industrial garantizando al mismo tiempo la seguridad y los derechos fundamentales.
La Unión ha desarrollado, partiendo de esa visión, una Estrategia de Inteligencia Artificial que busca convertir a la UE en un hub mundial para la IA – la mencionada excelencia – y garantizar un enfoque de la misma centrado en el ser humano – el principio de confianza -. Dicho objetivo se traduce en un Libro Blanco que publicado en febrero de 2020 y que establecía normas y acciones concretas. Con el fin de materializar esta estrategia, en abril de 2021, la Comisión presentó su paquete de medidas sobre la IA, que incluía:
- En primer lugar, la Comunicación sobre el fomento de un enfoque europeo de la inteligencia artificial, que consiste en la propuesta de un marco normativo sobre la IA y trata con las dos caras de la inteligencia artificial: oportunidades y riesgos. Propone un enfoque normativo europeo basado en la evaluación del riesgo, evitando la extralimitación normativa.
- En segundo lugar, la revisión del Plan Coordinado sobre la IA que había sido adoptado por la Comisión y los Estados miembro en 2018, tras la evolución del contexto tecnológico y político-económico europeo.
- Finalmente, una propuesta de Reglamento para establecer normas armonizadas sobre la AI. Esta propuesta supone el primer marco jurídico sobre la IA y aborda los riesgos de los usos específicos de la IA. Continúa pendiente de aprobación por las comisiones parlamentarias pertinentes – la de Mercado Interior y Protección del Consumidor y la de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior – para posteriormente ser votado en sesión plenaria en el Parlamento Europeo.
Bajo ese marco se ha producido la presentación de la mencionada propuesta de Directiva sobre responsabilidad civil en materia de AI, que establece unas nuevas normas uniformes de responsabilidad para proteger a los consumidores y fomentar la innovación. En consonancia con los objetivos del Libro Blanco sobre la IA y con la propuesta de Reglamento sobre IA de 2021 de la Comisión, el objetivo de la nueva propuesta de Directiva es favorecer una armonización específica de las normas nacionales sobre responsabilidad civil en materia de IA, facilitando así que las víctimas de daños relacionados con la IA obtengan una indemnización y garantizando un acceso más fácil a las vías de recurso.
Dichas normas tratan específicamente con el acceso a la información y la reducción de la carga de la prueba en relación con los daños provocados por los sistemas de IA, estableciendo una protección más amplia para las víctimas – ya sean particulares o empresas – y fomentando el sector de la IA mediante un establecimiento de mayores garantías. Concretamente, la normativa, allá donde parezca probable un nexo entre culpa y rendimiento de la IA, tendrá en cuenta las dificultades de las víctimas para probar un daño provocado por acción u omisión humana no diligente; por otra parte, las víctimas dispondrán de más herramientas para solicitar una reparación legal gracias a la introducción de un derecho de acceso a las pruebas presentadas por empresas y proveedores en los casos en que esté implicada IA de alto riesgo.
Esta nueva iniciativa, sometida a consulta pública por la Comisión Europea y que será debatida posteriormente por el Parlamento y el Consejo, es una muestra más del papel que quiere desempeñar la Unión a la hora de liderar una transición digital de la economía global con un enfoque humanístico y desde unos estándares globales que pongan el foco en la ética y los valores democráticos.
Silvia Goya Echávarri
EU Public Affairs
ATREVIA Bruselas